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La Arquitectura

La Arquitectura

 

La mayor parte del conocimiento actual de la arquitectura griega proviene del período arcaico tardío. Ésta sienta las bases de lo que será la arquitectura del mundo occidental durante siglos.

La arquitectura refleja las ideas de orden, proporción y armonía del ideal de belleza griego. Todas las manifestaciones artísticas griegas se caracterizan por este rasgo. La perfección estética se trasladaba de la idea al mármol, y del mármol volvía a ser una idea de perfección ante el espectador.

Es una arquitectura fundamentalmente adintelada, aunque conocían la bóveda no la utilizaban. Como toda expresión artística, va evolucionando según trascurre el tiempo. Cada vez se alcanza mayor grado de perfección hasta la época clásica donde culmina con la perfecta armonía de las formas como máximo exponente.

Es cierto que esta arquitectura que comparte íntimos rasgos primigenios con la arquitectura egipcia, tiene un aire monumental, pero sus edificios nunca alcanzan tamaños colosales como en Egipto. La idea de fundir el arte con el entorno era un precepto importantísimo para el artesano griego.

Como ya hemos comentado anteriormente, los teatros se adaptaban al entorno, al igual que las ciudades y no al contrario, como sucederá en Roma. Con lo que siempre encontraremos edificios hechos para el uso del hombre. Sobre todo si hablamos de la arquitectura civil.

En este sentido sólo los templos tendrán un tamaño algo mayor, puesto que eran la morada de la divinidad y debían ser contemplados desde toda la ciudad. Con lo que su tamaño estaría justificado.

Los materiales frecuentemente empleados en la arquitectura griega fueron la madera, para soportes y techos; ladrillo sin cocer para las paredes, especialmente de casas; la piedra caliza y el mármol, para columnas, muros y porciones elevadas de los templos y edificios públicos; la terracota, para ornamentos; y metales, especialmente el bronce, para detalles decorativos. Los arquitectos de la época arcaica y clásica usaron estos materiales constructivos para edificios: religiosos, cívicos, domésticos, funerarios y recreativos. El adobe se reservaba para las construcciones más pobres y sin importancia.

No puede olvidarse que el aspecto general de los edificios era distinto al que se ve actualmente, ya que se pintaban con colores brillantes, de rojo, de azul, de tal manera que llamaban la atención no sólo por su estructura, sino también por su policromía.

Nos encontramos ante una arquitectura muy equilibrada en cuanto al trazado de sus líneas. Se puede hacer fácilmente una lectura proporcionada, por qué todo este hecho con una medida, con un canon.

 

Y este canon diverge entre las polis del continente y las de las islas, o las situadas en las costas de Asia Menor. Por ello, al hablar de orden, debemos hacer una distinción según el estilo.

Como hemos afirmado anteriormente, la arquitectura griega presenta dos características fundamentales que son reflejo de esta mentalidad antropocéntrica y que se convierten a su vez en los puntos cul­minantes de esta forma de construir: en primer lugar, la adopción de la escala humana como elemento de referencia y, en segundo lugar, las particulares características del progra­ma arquitectónico desarrollado. A continuación pasaremos a analizar de qué forma influye el primero de estos conceptos en la producción arquitectónica griega. El concepto de escala humana está íntimamente relacionado con la insistente preocupación por la estética que caracterizó a estos constructores, la cual, los llevó a la valoración global del edificio como si de una escultura se tratase. Desde el punto de vista griego, el templo –como tipo más importante dentro de la producción edilicia de esta civilización- pretendía ser la plasmación en piedra de una composición ideal abstracta y objetivamente bella –la Idea de Templo, que diría Platón- a la que estos constructores intentaban aproximarse mediante un proceso de investigación empírica.

Esta relación se definió con el nombre de Orden Arquitectónico y tomaba como módulo de base el radio o el diámetro del tercio inferior de la columna, quedando así perfectamente fijadas y relacionadas las dimensiones de todas las partes que componían el edificio a partir de esta medida inicial. Como mas tarde veremos con mayor detenimiento, los griegos manejaron tres tipos formales ideales de órdenes: el orden Dórico, el Jónico y el Corintio, si bien, este último podemos considerarlo como un subestilo del jónico, pues solo varía el capitel con respecto a éste, presentando la misma relación proporcional entre los elementos que lo componen. Los dos primeros, comenzaron a emplearse desde los primeros tiempos, mientras que el último, tardó mucho más tiempo en utilizarse. Por último, otra consecuencia relevante de esta preocupación por la estética fue la elección consciente del sistema adintelado como modelo estructural. Su elección fue debida a la sensación de serenidad que transmite al observador frente a la tensión que genera en el mismo el uso del arco, también conocido y empleado, aunque muy escasamente, en este periodo como puede observarse en las construcciones del santuario griego de Olimpia

2 comentarios

Leithient -

Huy, mira, me he equivocado con la dirección de mi cuaderno de bitácora y ha salido uno rarísimo. :lol:

Leithient -

Me alegro de que te haya dado por actualizar por estos lares, así podemos seguir disfrutando de los conocimientos enciclopédicos que tienes sobre Grecia y el resto de islas majas en las que se habla el griego. A ver si coges buen ritmo.